Durante el embarazo y la lactancia, muchas mujeres experimentan cambios hormonales que pueden provocar sequedad vaginal y otros síntomas incómodos. Es natural buscar alivio, pero es importante tener cuidado al elegir un hidratante vaginal. Algunos productos contienen hormonas que pueden ser dañinas para la salud de la madre y el bebé.
Los hidratantes vaginales que contienen hormonas, como el estrógeno, pueden interferir con la función hormonal natural del cuerpo y aumentar el riesgo de efectos secundarios, como sangrado vaginal o infecciones. Además, estos productos pueden ser absorbidos por el cuerpo y potencialmente afectar el desarrollo fetal o la salud del bebé durante la lactancia.
Recuerda
“estos productos pueden ser absorbidos por el cuerpo y potencialmente afectar el desarrollo fetal o la salud del bebé durante la lactancia.”
Es importante hablar con un médico o ginecólogo antes de usar cualquier producto nuevo en la zona íntima durante el embarazo o la lactancia. También se recomienda evitar los hidratantes vaginales que contienen hormonas. En su lugar, se pueden utilizar hidratantes vaginales sin hormonas o métodos alternativos de alivio, como lubricantes a base de agua y así implementar un tratamiento para la resequedad vaginal sin riesgos.
Fuentes:
Committee on Gynecologic Practice. (2016). ACOG Committee Opinion No. 659: The Use of Vaginal Estrogen in Women With a History of Estrogen-Dependent Breast Cancer. Obstetrics and gynecology, 127(3), e93-e96. doi:10.1097/AOG.0000000000001397
Jargin, S. V. (2018). Endocrine disruptors, health risks and pervasiveness in food and water. Reviews on Environmental Health, 33(3), 243-249. doi:10.1515/reveh-2018-0017
